Q Control, el mando universal de HP

Simplificar y unificar una gama de miles de productos y diseños a través de una actitud consistente, no debe ser una tarea nada fácil. Sin embargo, esa es la labor de Sam Lucente, director de experiencia y diseño de la marca HP.

Centrando sus esfuerzos en crear una gama de productos más familiar y simple, ha propuesto, por ejemplo, un único logo para cualquiera de los productos de HP y, especialmente, un único control de navegación para reemplazar las decenas (o centenares) de ellos que están utilizándose actualmente: el Q Control.

Q Control de HP

Más información en Fast Company [en].

Bookmarking urbano. Los códigos QR

Pensad por un momento como podríamos extrapolar los enlaces de la web al mundo físico (a.k.a. MundoReal™). Los llamaríamos hiperenlaces en el mundo físico o Hardlinks. Una conexión entre la información del MundoReal™ e Internet.

Si pensaste en algo como esto es que andamos un poquitín despistados, porque me estoy refiriendo a los códigos QR, que ya aparecen hasta en la sopa:

Bufanda de Space Invaders con código QR

No hay que fijarse muy detenidamente para ver que esta bufanda de space invaders contiene una matriz pixelada, que es efectivamente un código QR. Es un código de barras de 2 dimensiones creado por los japoneses en 1994 para llevar el control de las partes de un vehículo durante su fabricación. Las siglas QR significan “Quick Response” (respuesta rápida), en relación a que sus contenidos se decodifican a gran velocidad. Actualmente, estos códigos se pueden decodificar fácilmente a través de un móvil con una cámara de fotos.

Poca utilidad le veo al código de la bufanda más allá que la de promocionar la empresa de servicios para telefonía que anda detrás. Sin embargo, un escenario común podría ser el siguiente: llega a tus manos el flyer del último concierto de Daft Punk y piensas que podrías ir llevando puesta tu máscara de perro Boxer. Justo en la esquina inferior izquierda del flyer (junto a la información sobre las entradas) identificas un pequeño código QR. Immediatamente tomas una fotografía del código con tu móvil y éste la convierte en una URL que te lleva a una página de Internet donde puedes comprar la entrada del concierto.

¿Estáis imaginando la cantidad de utilidades, servicios, arte y polladas que se pueden crear? En Japón ya las tienen.

Por último, anotar que la especificación del código QR es abierta y tiene su correspondiente estándar ISO. ¿Qué más se puede pedir? Esto va a triunfar más que los cromos de Pokémon. Ahora, alguien que tenga un móvil con cámara, ¿puede hacerme el favor de decirme de una vez cuál es el mensaje secreto de este QR-code?

Están locos estos madrileños…

Si nos preguntaran por qué lado nos viene el metro en nuestra ciudad (Barcelona), seguramente nos costará responder rápidamente. Quizás deberíamos hacer el recorrido mental y situarnos en el andén en el que esperamos cada día el metro para ir a trabajar. Si forzamos el ejercicio preguntándole a un madrileño que lleve una temporada viviendo en Barcelona, posiblemente tarde mucho más que nosotros en responder.

Metro Madrid

Esto es debido a que el metro de Madrid llega por nuestra derecha, es decir circula por la vía de su izquierda mientras que el metro de Barcelona nos llega por nuestra izquierda.

Haciendo un poco de historia sabemos que en Madrid los coches y tranvías circularon por la izquierda como en Inglaterra hasta 1924, mientras que en Barcelona siempre lo hicieron por la derecha. Hasta 1930 no se unificó el tráfico en España por la derecha y, por aquel entonces, una modesta linea de metro llevaba 10 años funcionando por la derecha de las vías. Con una ampliación durante los años 20 en marcha, la conveniencia de adaptarse a la conducción española fue considerada inviable a causa del elevado coste económico del cambio de los sistemas de señalización.

También influyó en esta diferencia con el resto de metros españoles que la Red de Metro de Madrid era, y sigue siendo, totalmente independiente del resto de redes ferroviarias del país.

Esto pasa en España, pero como podemos ver, en el resto del mundo tampoco se han puesto de acuerdo sobre que lado es el más adecuado para hacer circular sus metros. Por ejemplo:

  • Londres: izquierda y derecha
  • Tokyo: izquierda
  • París: izquierda (pero los trenes regionales de la derecha)
  • Buenos Aires: izquierda
  • Santiago de Chile: derecha
  • Nueva York: izquierda

Os animo a que dejéis en los comentarios las direcciones de los metros del mundo que conozcáis.

Están locos estos españoles…

Volvemos al tema de la estandarización de los medios de transporte, esta vez con relación al ferrocarril.

¿A cuánto corto el travesaño?

Al leer una noticia sobre el retraso de la llegada del AVE a Barcelona, pude comprobar que está preparado para ir sobre vías de ancho europeo de 1,435 metros. Sin embargo el resto de la red ferroviaria español es de 1,676 metros. De siempre se ha escuchado que esta diferencia respondía a razones estratégicas y militares para evitar así una posible invasión francesa como la que provocó la Guerra de la Independencia.

Realmente no fue así y simplemente se debió a cuestiones técnicas. El ancho de vía europeo era el originario del sistema francés (1,435 metros). A finales de 1843 el gobierno encarga a dos ingenieros, Subercase y Santa Cruz, un informe sobre la implantación masiva de este medio de transporte en España. Ellos concluyen que debido a nuestra compleja orografía, el ancho de vía debía ser de 1,676 metros que equivalía a seis pies castellanos de la época. Según el informe, el aumento de anchura responde a la necesidad de dar cabida a locomotoras más grandes y potentes que otorgarían a los convoyes mayor velocidad y estabilidad.

Nuestro caso no es único en disparidad de medidas. Si nos damos una vuelta por las redes de ferrocarril del mundo veremos que la estandarización está bien remota. Estos son algunos de los anchos mundiales:

0,762 m
India, Sri Lanka, Austria, Bosnia, Polonia, Chequia, Alemania, Eslovaquia, Rumania
1 m
Gran parte de África Oriental y el sureste asiático, India, Pakistán, China, Bangladesh, Birmania, Bolivia, Brasil, Chile, Portugal, Grecia, Suiza, Argentina y España (nuestra famosa vía estrecha)
1,067 m
Australia, Nueva Zelanda, Ghana, Sudán, indonesia, Japón, Ecuador
1,435 m
La mayor parte de Europa, EEUU, Australia, norte de África, Israel, China, Corea del Sur, Japón, Perú, Venezuela, Argentina, México
1,6 m
Irlanda, Australia, Brasil
1,676 m
España, Portugal, india, Pakistán, Sri Lanka, Bangladesh, Argentina, chile

Para acabar de “arreglar” la situación, obervamos que en países como Australia, España, Argentina, Brasil e India conviven distintos anchos de vía.

Los problemas de falta de estandarización respecto al ancho de las vías son más que evidentes: pasajeros obligados a hacer transbordo de tren, problemas en el movimiento interno de mercancías y por supuesto también en el comercio exterior. De momento, la única solución válida que existe es dotar a los trenes y vagones de sistemas de cambio de ancho de sus ejes como nuestro Talgo.

Así que si algún estratega nostálgico pretende realizar sus sueños de conquista mediante el ferrocarril, lo tiene bastante difícil.

Más información en la Wikipedia [en].

Están locos estos ingleses…

Esta frase seguro que también la piensan ellos pero con nosotros como sujeto. Todo el mundo se ha preguntado alguna vez el por qué de la conducción por el lado izquierdo de la calzada de los países anglosajones. Intentemos dar algunos datos:

EL conductor británico más famoso de todos los tiempos

No existen claros indicios históricos que demuestren la forma con la que se circulaba por los caminos en la antigüedad. Partiendo de la base que la gran mayoría de la población es diestra, lo más normal es que se controlara a la montura con el brazo izquierdo y se dejara el brazo derecho libre para saludar a los demás viajeros o para utilizar la espada en caso de ataque o defensa. Esto nos hace pensar que el lado más natural para circular debería ser el izquierdo de la calzada.

En 1998 se encontraron los restos arqueológicos de una antigua vía romana que conducía a un pozo minero en Swindon, al sur de Inglaterra. Los arqueólogos pudieron comprobar que los surcos dejados por el paso continuado de los carros eran mucho más profundos en el lado izquierdo de la calzada. Ese era el lado que salía de la mina con lo que concluyeron que se circulaba en dicho sentido durante aquella época y en aquella zona del Imperio.

La primera referencia legal escrita sobre el uso de la circulación por la izquierda la encontramos en 1756. En ella se regula el tráfico de caballos por el lado izquierdo del Puente de Londres.

A finales del siglo XVIII, principalmente en los Estados Unidos de América se produjo el cambio a la circulación por la derecha. Con el uso de las largas diligencias, tiradas por hasta ocho caballos, los cocheros se sentaban en el último caballo de la izquierda. Al conducir por la derecha podían controlar las distancias con los otros carruajes que les adelantaban por la izquierda y evitar sobre todo la colisión entre ruedas.

En Inglaterra las diligencias eran más pequeñas y los conductores tenían un asiento en el lado derecho. Así podían utilizar el látigo sin el riesgo de atizar a los pasajeros que llevaba detrás. Esta costumbre se trasladó a todos los países del Imperio Británico.

Posteriormente, con la invención de los automóviles a motor se colocó la zona de control y mando (volante y cambio de marchas) en el centro del vehículo. Según la tradición de cada país se desplazó el asiento del conductor hacia un lado u otro. Así, los que conducen por la derecha están más cerca del centro de la calzada y pueden ver venir los coches con mayor facilidad. También el conductor puede cambiar de marcha y manipular los controles del coche con la mano derecha. Por otro lado, los que circulan por la izquierda tiene más fácil el evitar rascadas y obstáculos.

Así que como en muchos otros aspectos de nuestra vida cotidiana, la estandarización en la conducción es, por el momento, una utopía. Estos son algunos datos del panorama actual:

  • El 34% de la población mundial circula por la izquierda y el 66% por la derecha;
  • El 28% de las carreteras están preparadas para circular por la izquierda y el 72% por la derecha;
  • Los 4 únicos países de Europa que circulan por la izquierda: Gran Bretaña, Irlanda, Malta y Chipre, son islas y no tienen fronteras con países que conduzcan por el sentido contrario.

¿Qué pasará cuando los millones de chinos y los millones de indios se dediquen a hacer turismo rodado en el país del vecino?

Carga tu móvil, pero no lo manches de ketchup

Ya hemos hablado sobre la conveniencia de un estándar en cargadores de teléfonos móviles, pero aquí tenemos un curioso ejemplo. Curioso porque se ofrece en un Burguer King de Filipinas y del que se puede obtener un indiferente estudio de mercado: la mayoría de los clientes de Burguer King en Filipinas usan Nokia.

Cargador de móviles en un Burger King de Filipinas

La misma Nokia dispone en su gama de móviles que necesitan cargadores diferentes entre sí. Queremos ya cargadores de móvil universales por USB.

Vía Eres Un Geek.

¿Por qué el botón de grabar es rojo?

El uso del rojo y el verde, especialmente cuando se emplean juntos, es una de las pistas comprensibles más universales de diseño. El rojo es señal de que algo va mal. Atención, quieto, ¡alarma! En cambio el verde indica que todo va bien, adelante, en funcionamiento. Esto genera un problema de diseño cuando tratamos con algún aparato utilizado para grabar:

Sony DVDDirect

Creative Zen V Plus

Como vemos, rojo indica grabar. Así que es natural utilizar el color rojo para indicar que el aparato está grabando, su funcionamiento normal. ¡Pero hemos visto que el rojo significa alarma! El funcionamiento normal del aparato utiliza una señal roja que contradice el hecho de que todo va correctamente.

Así pues, ¿cuál es la razón de que el botón de grabar sea rojo? Como muchas veces, la razón es histórica. Proviene de que el color rojo significaba en la radio un aviso. “¡Shhhhh! Silencio, estamos grabando”. ON AIR:

ON AIR

(Os recomiendo ver y oir la presentación de Bill DeRouchey: Learning Interaction Design from Everyday Objects.)

El peligro de los estándares con nombre y apellido

Knight Industries Two Thousand y Cyberdyne Systems Corporation han llegado a un acuerdo para crear un sistema estándar de comunicación entre máquinas y humanos.

Este titular refleja al dedillo la definición de estándar: un acuerdo entre un grupo de profesionales oficialmente autorizados para establecer una recomendación o regla basada en su experiencia práctica. Dependiendo de ciertas características en esta definición, los estándares se dividen en los dos tipos siguientes:

  • Los estándares de iure son generados por un comité con estatus legal y están avalados por el apoyo de un gobierno o institución para producir estándares. Es un proceso complejo que podríamos resumir de la siguiente manera: se generaría un borrador público con las especificaciones de comunicación máquina-humano, en el que cualquier interesado podría presentar enmiendas. Acme Corporation, por ejemplo, podría no estar de acuerdo con la propuesta de dejar a las máquinas controlar el arsenal militar de los Estados Unidos con independencia de los humanos. Una vez hechas las correcciones y alcanzado un consenso, se aceptaría el nuevo estándar.

    ISO, ANSI, IEEE y W3C son ejemplos de comités que crean estándares de iure en informática.

  • Los estándares de facto tienen un carácter más romántico e ideal. Se generan a partir de desarrollos que hayan tenido una gran difusión o del éxito que puedan tener ciertos productos en el mercado. Probablemente, el uso generalizado del Turbo Boost, convertiría esta característica en un estándar de facto para los coches controlados por inteligencia artificial. Encontraríamos la definición de este estándar en el mismo manual que acompaña al automóvil.

    Entre los más conocidos estándares de facto se encuentran la obsoleta cinta de video VHS, la iconografía de los aeropuertos o la disposición de los números en los teclados y teléfonos.

Así pues, tenemos a Cyberdyne Systems Corporation dispuesta a facilitarnos la vida gracias a un maravilloso estándar. Podremos comunicarnos con todas las máquinas de la misma manera. No tendremos porqué preocuparnos de cómo confirman nuestros datos. Todas dicen: “afirmativo”.

Sin embargo, no olvidemos que Cyberdyne es una empresa y como tal, estará dispuesta a aprovechar su imagen y su ventaja tecnológica para ocupar una posición predominante en el mercado. Una posición que peligrosamente podría acercase al monopolio. Y cuando un estándar no es público, sino un producto perteneciente a una compañía privada, es probable que los consumidores acaben arrepintiéndose de haberle dado tanto poder…

Los estándares son en la leche

Pensé en escribir sobre el color de los cartones de la leche el día que me traje a casa leche desnatada en vez de entera. Supuse que la leche entera siempre había sido de color azul, ¿por qué entonces iba Central Lechera Alpina a usar el color rojo para los cartones de leche desnatada?

Cartones de leche entera, semidesnatada y desnatada

Decía que estaba pensando en escribir sobre esto, un ejemplo más de cómo la falta de estándares nos complica la vida, cuando he encontrado “Si no usamos estándares esto es la leche“, que refleja exactamente esto que quería comentar y, además, contiene una tabla con la relación de los distintos colores por marcas y tipo de leche.

Me gustaría, eso sí, aportar una pequeña solución que veo a menudo en paises más “ordenados” que España. No tiene que ver con una tecnología más avanzada, simplemente consiste en ir “aclarando” el color. Acostumbran a usar el azul. Así es común encontrar la leche entera en cartones azul oscuro, la semidesnatada en cartones azules y se reserva el azul claro (las mujeres lo llaman celeste) para la leche desnatada.

Cartones de leche entera, semidesnatada y desnatada (alemanes)

Menos mal que la leche de soja y de arroz no se pueden descremar.