La mejor manera de ver un cuadro
En Diciembre de 2004, Google lanzó el Proyecto para bibliotecas de la Búsqueda de libros, consistente en indexar la información de los libros en formato papel. A partir de ahí ha escaneado hemerotecas completas, miles de revistas, fotos del semanario Life y, antes de pasar a indexar el ADN de toda la humanidad, han hecho lo propio con las Obras Maestras del Museo Nacional del Prado.
La noticia no es nueva, pero hasta hoy no han incorporando en Google Maps el último de los cuadros, la Artemisa de Rembrandt. Todos ellos en Gigapixel, es decir, con una nitidez 1.400 veces mayor que la que se obtendría con una cámara digital de 10 Megapíxeles. La interfaz de Google Maps está siendo cada vez más explotada (ya la vimos para “leer” revistas impresas) y me parece que, con el auge de las pantallas táctiles, cada vez lo será más.
Me vienen a la memoria unas jornadas de Usabilidad del 2005 en la que uno de los ponentes sentenció desde el inicio que “los ordenadores no son la mejor manera de ver un cuadro“. Esta visto que uno no puede abrir la boca sin que Google le deje en evidencia.